Con la tecnología de Blogger.
Mostrando entradas con la etiqueta resumen. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta resumen. Mostrar todas las entradas

Lo mejor de 2014

Es el último domingo del año y, como domingo que es, debería seguir teniendo mi tradición de publicar un top 5, pero como es el último del año voy a cambiarlo por un top anual, haciendo un poco de balance con lo que más me ha marcado este 2014.

Para mí ha sido un año clave. He vivido muchas cosas importantes, he pasado de etapa, he madurado... En tan solo unos meses puedo decir que no soy la persona que era antes en muchos sentidos. A veces echo de menos a esa persona que era, porque he perdido cosas posiblemente buenas, pero luego me doy cuenta de que todos esos cambios son para mejor.

Llevo mucho tiempo reflexionando a cerca de todo esto, porque tengo la sensación de que ahora el futuro está más cerca que nunca. Ese futuro que parecía tan y tan lejano, del que hablaba casi como una ensoñación, temiéndolo e idealizándolo a partes iguales. Ese futuro con el que decíamos "Cuando yo sea mayor..." o "Más adelante, cuando me vaya de casa...". Pero todo es ya, es dentro de nada, a la vuelta de la esquina. Y me planteo si lo he enfocado bien, si me tendría que haber preparado mejor, si realmente estoy preparada, si todo cuanto he hecho este año me acerca más a la persona que quiero ser.

En general ha sido un buen año. En la nochevieja de 2013 me dije a mí misma que 2014 sería mi año, y creo que lo he conseguido. Cierto es que no he hecho todo lo que pretendía, pero me he acercado bastante y sé de buena fe que en 2015 se hará. Por fin sé lo que quiero y estoy enfocada a conseguirlo.

Ahora comparto con vosotros lo mejor de este 2014 que ya se nos va en unos días:


1- Mi graduación.

¡Estoy graduada! Se puede decir que tengo una carrera y soy alguien (relativamente). Pero lo más importante es que he pasado una etapa muy destacada de mi vida. Parece una tontería, pero las cosas se ven muy diferentes ahora, como si algo en nuestro cerebro se hubiera activado de repente. Y hay miedo, claro que lo hay, y mucho. Porque todo parece estar mal, porque no sabemos lo que queremos, porque nos da la sensación de que una carrera no ha servido para nada... Pero es todo falso, es inseguridad, y se supera con el tiempo. Hay todo un mundo se posibilidades ahí fuera, lejos de nuestra zona de confort, y yo todo lo que pueda ofrecerme el mundo, lo quiero.

Los primeros días tras la graduación fueron muy raros, me sentí vacía. Necesité tiempo para adaptarme a mi nueva situación y pensar qué era lo que quería de mi vida. Por suerte, poco a poco lo voy descubriendo y me va gustando el rumbo que tomo.

¡Ah! Y no se puede olvidar el acto en sí, por supuesto. Estuve tanto tiempo pensando en el vestido y en los zapatos y en todo... y al final encontré el vestido perfecto. Fue un momento muy emocionante que nunca olvidaré.

Con mi amiga Nerea y con mi padre (¿A que somos clavados?)