Como cualquier otra devoradora de libros, me encanta una buena historia de ficción como a la que más. No obstante, después de pasar la fiebre de las novelas juveniles (que, por otra parte, me siguen encantando) y pasar a la etapa joven adulta de mi vida, me comencé a sentir más atraída por los libros más estéticos. Sí, esos libros que te engatusan solo con ver su portada y que sabes que los necesitas para mirarlos cada día y ser un poco más feliz.
Este tipo de libros también existen y hoy, en el Día del Libro, quiero reivindicarlos. Comúnmente se conocen como "libros de mesa de café", puesto que son esos ejemplares que se colocan en las mesas bajas o en las estanterías a modo de decoración. Eso no quiere decir que no se lean, sino que se leen de otra manera.
Este tipo de libros se lee despacio, apreciando toda su belleza. No es de ese tipo de ejemplares que leemos con necesidad, cada día, porque su historia nos engancha. Ni siquiera de aquellos de no ficción que hablan de anécdotas o vidas interesantes. Generalmente, van acompañados de impresionantes imágenes o ilustraciones que merece la pena observar con detenimiento.
Normalmente, suelen ser de estilo ('It', de Alexa Chung, cualquier título de Vogue...), pero hoy os traigo una selección con un poquito de todo. Moda, belleza, decoración, estilo de vida, fotografía... Algunos los tengo y otros los deseo. Solo espero que, al menos, os pique el gusanillo de este tipo de literatura, que se puede llevar perfectamente de forma complementaria con otro estilo de novelas.