Voy a dedicarle un post a las peonías.
Las peonías son mis flores favoritas. Tienen todo lo que me puede atraer de las flores: son exclusivas -pero no lo suficiente como para no encontrarlas-, de colores suaves, grandes, hermosas, delicadas, sofisticadas y no tan explotadas como otras variedades. Sé que serán las flores que llevaré en mi ramo de novia si algún día paso por el altar.
Me encanta verlas en fotos, en ilustraciones y en estampados. Me parecen más románticas que las rosas, con la diferencia de que estas no se ven tanto, por lo que resultan un regalo más original. Si quieres tenerlas solo podrás durante un par de meses al año y en ese tiempo puede que no llegues a dar con un ramo porque no suelen vender muchas o ya llegas tarde.
Mi pasado cumpleaños, Mr. Preppy me sorprendió con un ramo de peonías y no pude ser más feliz. ¡Fueron mis primeras peonías naturales! Las pobres no duraron más de dos días, pero fue suficiente para disfrutarlas. Aprovechamos ese tiempo para hacer estas fotos porque a saber cuándo voy a poder tener otro ramo entre mis manos.